Crédito entre empresas, la alternativa más viable para reactivar el turismo en nuestro país.

A más de un año de iniciada la crisis mundial por Covid-19, diversos rubros se han visto afectados en su economía, uno de los más golpeados ha sido el sector turismo.

A consecuencia de la pandemia por COVID-19, el turismo en México cayó un 74.8% durante 2020.

De acuerdo con datos del INEGI, la industria del turismo en México, genera  alrededor del 8.7% del PIB. Pero para que este gran eslabón económico pueda desarrollarse, es necesaria la participación de otros sectores como la red de hoteleros que aporta el 29.2% del valor, restaurantes, bares y centros nocturnos con 15.3%, artesanos 11.4%, servicios deportivos y recreativos con el 1% cada uno, transporte y aerolíneas con el 18.7%, agencias de turismo 0.7%, prestadores de servicios 15% y  el comercio turístico 7.8%. Todos en conjunto, logran formar un círculo o cadena que aporta 7.5 millones de empleos en el país y representa la tercer fuente de captación de divisas.

En 2019, México se consolidó como uno de los 10 países más visitados del mundo al recibir más de 45 millones de turistas internacionales con una derrama económica de 24,563 millones de dólares y un crecimiento de 9% anual.

Sin embargo, en 2020, las cifras cayeron alrededor del 74.8% y aunque nuestro país fue el tercer destino turístico más visitado a nivel global, el confinamiento a nivel mundial y las restricciones de viajes turísticos en todo el mundo, trajeron consecuencias económicas graves en los diferentes sectores, los hoteleros por ejemplo,  han enfrentado problemas de liquidez, pues el encierro orilló al turismo y viajeros de negocios a adoptar soluciones nuevas como las videoconferencias, además, el distanciamiento social obligó a que los hoteles  ofrezcan menos habitaciones, mismo caso con el sector restaurantero.

Por su parte, las aerolíneas nacionales, registraron una caída del 52.8% en el número de pasajeros y 44.9% menos  de vuelos.  Una cadena negativa, donde lo que le afecta a una empresa, le afecta a todas las demás.

Empresarios prevén recuperación turística hasta 2023.

Ante la evidente crisis económica del turismo en nuestro país, empresarios y gobierno buscan la  mejor estrategia para reactivar el sector.

El avance en la aplicación de vacunas contra Covid-19, le ha dado un respiro a algunas empresas como la restaurantera, mientras que otros han aprovechado la demanda de ciudadanos en busca de  vacunas para salir del confinamiento, ofreciendo viajes al extranjero para obtener la inmunización. Según la Asociación de Cultura y Turismo de América Latina, al menos 400 mil mexicanos han viajado a Estados Unidos con la intención de vacunarse contra el Covid-19.

A pesar de ello, la Asociación para la Cultura y el Turismo en América Latina  resaltó que los altos intereses que brindan algunas instituciones financieras ponen en desventaja a la industria turística de México y los apoyos del Gobierno  Federal son insuficientes o poco convenientes, tal es el caso del  plan que presentó para impulsar al sector hotelero para sortear la crisis por Covid-19 que consistirá en prestar 11,400 millones de pesos a estos establecimientos a una tasa máxima del 13.5 % de interés.

El panorama para los empresarios es poco alentador, pues se estima que el turismo en México, crecerá apenas un 3.4% respecto a 2020, por lo que la industria turística mexicana, no se recuperará por completo hasta 2023, según las estimaciones de Miguel Torruco, titular de la Secretaría de Turismo.

En resumen, la  industria del turismo presenta graves problemas de liquidez, provocando una cadena de desabasto y desempleo ante la poca llegada de viajeros tanto nacionales como extranjeros.

Algunos de los que han logrado sobrevivir, lo han hecho a través de estrategias como financiamiento a través de los bancos o en algunos casos a través de sus propios proveedores, quienes otorgan mayores plazos de pago o incremento del crédito.

El reto para los empresarios es recuperar esa deuda apoyados de herramientas como el Seguro de Crédito para empresas, donde la garantía es la indemnización de la factura en caso de que un cliente no logre sobrevivir la crisis y por lo tanto no pueda pagar el crédito.

Síguenos en: